Estoy realmente emocionado. Cada día lo compruebo más: La vida está hecha para disfrutarse, a pesar de lo que nos suceda.

Ha sido una semana magnífica, llena de paz, tranquilidad, reflexión y muchos mensajes del universo. Tengo tanto que contarte que no podría terminar en este espacio…

Me tomé estos días de descanso para «invernar» (Tal cual oso) en la comodidad de mi casa. Pasé mucho tiempo en mi habitación, dejando mi agenda, ajetreo o pendientes a un lado, para «estar conmigo».

Dejé a un lado los viajes, aviones y aeropuertos para «viajar al interior», disfrutando de buenas películas, exquisitos libros, ricas conversaciones con la gente que quiero, y hasta jugué algunos partidos de dominó con mi papá (que para los que conocen mi vida o saben la historia, verlo jugar fue un verdadero milagro).

Es delicioso disfrutar de estos momentos.

Querido lector, amigo o suscriptor, desde lo más profundo de mi corazón te digo: ¡HAY QUE DISFRUTAR LA VIDA! a pesar de quien esté, de lo que se diga o de lo que suceda.

Es urgente y necesario regalarnos esos instantes mágicos, para poder tomar una taza de té calientito, descansar sin hacer ABSOLUTAMENTE NADA, observar los árboles que pareciera sólo son «objetos de decoración», quedarte abrazado de la persona que amas, escuchar el canto de los pájaros o simplemente sentir cómo el agua toca nuestras manos al momento de lavarlas.

Es I M P R E S I O N A N T E poder conectarnos con nuestra ESENCIA y estar con nosotros mismos, gozando, simplemente…gozando.

Tan es así, que no estoy de acuerdo con REGRESAR A LA REALIDAD, después de vacaciones.

Ésta…EL PODER DISFRUTAR AL MÁXIMO…es la auténtica y más pura realidad que deberíamos de vivir a diario.

Con todo mi cariño te digo, es nuestro deber y obligación: DISFRUTAR LA VIDA.

¿No crees? Nos leemos la siguiente

Mi Carrito0
Aún no agregaste productos.
Seguir viendo
0