¿Qué te hace levantarte cada mañana?
¿Cuál es tu primer pensamiento del día?
¿Qué te mueve, qué te hace vibrar?

Hace poco estaba impartiendo una Conferencia Vivencial a un grupo de jóvenes líderes y una de las preguntas que surgían era precisamente: ¿Por qué no soy plenamente feliz? y aunque en ese tema podríamos ahondar horas y horas, incluso he escrito decenas de artículos al respecto, una de las respuestas que llegó de inmediato a mi mente fue: Por no tener un propósito.

Según cientos de filósofos, psicólogos y especialistas en materia de comportamiento humano, existe una gran diferencia entre las vidas de las personas que saben porqué están exactamente en la Tierra y las de aquellos que sólo pasan como hoja al viento, limitándose a respirar. En otras palabras, tener un propósito de vida es darle sentido a nuestra existencia.

«Vivir con propósito es vivir productivamente, es una exigencia de nuestra capacidad para afrontar la vida. La productividad es el acto de conservación de la vida plasmando nuestras ideas en la realidad, fijando nuestras metas y actuando para conseguirlas». (Branden, N.(1995). Los seis pilares de la autoestima. México: Paidós)

¿Cuál es tu propósito? ¿Para qué naciste? ¿Qué es aquello que haces y genera un gran impacto en el mundo? ¿Estás en el trabajo que siempre soñaste? ¿Con la pareja de tus sueños? ¿En el momento perfecto?

https://www.davidmontalvo.com.mx/

Mi Carrito0
Aún no agregaste productos.
Seguir viendo
0