¡Hola Inspirad@!, ¿qué tal tu fin de semana? Espero que de maravilla y que lo hayas disfrutado al máximo.

Pero, ¿qué crees? Hoy regresaste a la realidad.

Sí; despertar temprano, trabajo, escuela, pendientes, deberes, pagos, reuniones…

No quiero desmotivarte, pero tampoco lo podemos negar:

La mayoría detesta los lunes. Sobre todo por esa desagradable sensación de que ya pasó lo divertido y de que tiene que regresar a la obligación.

¿Cuál es el problema de los lunes? 

Ninguno. No hay problema. Es un día como cualquier otro. Claro, con su respectiva carga de trabajo acumulada, pero fríamente es sólo el inicio de la semana.

El verdadero (y gran) problema está en nuestra mente.

¿Por qué? Simplemente porque ya lo tenemos tan anclado y tan asociado a algo negativo, pesado y hasta sufrido, que ya no le encontramos el lado amable, como diría Chespirito.

Hace unos meses terminé el famoso libro «El poder de los hábitos» de Charles Duhigg. Si no lo conoces, de verdad búscalo y léelo en cuanto puedas. Te va a encantar.

Ahí el autor comparte cómo el condicionamiento puede ser nuestro peor enemigo o nuestro más grande aliado.

En palabras del mismo Charles:

«Tus hábitos no son tu destino. Los hábitos pueden ser ignorados, cambiados o reemplazados. Cuando un hábito emerge, el cerebro detiene la toma de decisiones». 

¿Qué podemos hacer entonces para mejorar nuestra percepción de un día tan «pesado» y tan «terrible» como el LUNES?

Algo muy concreto y simple es ASOCIARLO con algo que te de energía, placer y satisfacción. 

Ejemplo:

Dentro de tu día, agenda un tiempo determinado para hacer lo que más te rete, te apasione o más te relaje.

Ir al cine, salir a caminar con tu pareja, irte de compras, leer ese libro pendiente, llamarle a tu familiar, ver una película, escribir tus metas semanales, meditar o visitar a un viejo amigo, pueden ser buenas opciones.

Que sea algo diferente a lo que regularmente haces los fines de semana. Que sea tu actividad favorita de los lunes.

En lo personal, me ha servido mucho utilizar los lunes para hacer algo que estuve postergando la semana anterior. Ya sea algo personal o laboral.

Brian Tracy le llama: «Tráguese ese sapo». Es decir, «al mal paso, darse prisa». Hacer eso me ayuda a tener más claridad y enfoque sobre nuevos objetivos, mientras dejo detrás, lo que ya no funciona o lo que ya necesitaba cerrarse.

Y tú, ¿qué necesitas empezar a hacer LOS LUNES para que se convierta en el mejor día de la semana?

Déjame tus comentarios.

Te mando un fuerte abrazo a la distancia. Nos leemos pronto.

Mi Carrito0
Aún no agregaste productos.
Seguir viendo
0