Cuando hablo de crear la realidad, de reinventar la vida y de generar lo que soñamos, muchos me preguntan:

-David, ¿cómo sé si voy por el camino adecuado? ¿Si tengo el mejor empleo o a la pareja que realmente amo? ¿Cómo darme cuenta si mis pensamientos son los mejores para llevarme a la carretera del éxito?

Una de las formas más efectivas para saber si lo que estamos viviendo es lo que realmente queremos es aprender a escuchar a nuestras emociones. Arnoldo Arana, psicoterapeuta y consultor de empresas, afirma que las emociones son un «sistema de señales» que nos dan información que necesitamos en un momento determinado para orientar nuestras acciones.

Definitivamente, las emociones son mensajes escondidos que podemos sacar a la luz para saber cuáles decisiones tomar. No por nada, la inteligencia emocional se ha vuelto «el manual» de cabecera para muchas personas que están en su proceso de evolución.

No podemos andar ciegos por la vida ni creer todo lo que nos dicen. De hecho, el mejor consejero es cómo nos hace sentir esa persona o esa situación.

La pregunta clave que puedes hacerte es: ¿Cómo te hace sentir eso? (alguna persona, hábito, rutina, empleo, circunstancia)

Si te genera paz interior, amor, tranquilidad, emoción, pasión, es que va por ahí.

Si te arroja  frustración, debilidad, enojo, coraje, tristeza, ansiedad, probablemente no sea el camino.

Cabe aclarar que para descubrirlo necesitas primero conocerte y ser muy honesto, porque también influye tu interpretación. Pero estoy convencido que entre más trabajes en tu crecimiento personal, tendrás mayor claridad para iluminar el camino de escucha a tu corazón.

Date unos minutos, guarda silencio y escucha… simplemente escucha.