Hoy sólo te quiero pedir un favor: Ya no hagas propósitos.

Si los hiciste en diciembre o en enero, te voy a pedir que te retractes y te olvides de eso.

David ¿te volviste loco? ¡NO! (bueno un poco), la verdad es que está demostrado que cuando una persona escribe, piensa o decide cumplir algo en término de «propósito» el fracaso llega tarde que temprano.

Y NO, no es por flojo, mediocre, débil mental, poca fuerza de voluntad, y ese tipo de creencias que suelen tener muchas personas.

Lo que sucede es que en el momento en el que alguien se plantea UN PROPÓSITO está automáticamente poniéndole un candado a su mente.

La definición de propósito es clara, proviene del latín proposĭtum, que quiere decir la intención o el ánimo de hacer o dejar de hacer algo.

Como te das cuenta, un propósito se limita a una simple intención, y no necesariamente a un firme compromiso o el planteamiento de un objetivo.

¿Entonces qué hacer?

Te doy un inspiratip que a mi me ha funcionado en múltiples proyectos profesionales y personales: HAZLO EN PASOS.

Sí, tal cual. Piensa en tu meta. ¿Qué podrías hacer HOY, (no mañana, HOY) para acercarte a eso que deseas?

¿Una llamada? ¿Buscar información de algo? ¿Concertar una cita? ¿Comprar algo? ¿Dejar de hacer eso que te quita tanto tiempo?

Bueno, sea lo que sea, hazlo posible y ve por ese primer paso. No te quieras comer el pastel de una sola mordida. Una vez realizado, congratúlate de tu logro, y propón el siguiente paso. No te presiones ni te estreses si pasa un poco de tiempo del primero al segundo. Yo te aseguro que si vas colocando ladrillo por ladrillo, tarde que temprano lograrás ver tu crecimiento.

¿Parece fácil? Te reto a que lo hagas con eso que tanto trabajo te ha costado. Ya me platicarás.

Mi Carrito0
Aún no agregaste productos.
Seguir viendo
0